En un 500 metros de la carretera de Cervera a Agramunt, concretamente en el kilómetro 8, se localizan los restos del campo de aviación de l'Aranyó, también conocido como de Cervera, construido por el bando republicano en la comarca catalana de la Segarra. Situado en tierras de los términos de Hostafrancs y Concabella, el campo formaba parte del  tercer sector de la Región Aérea catalana, que integraba el Principado y una parte de Aragón. Las obras se iniciaron en 1937 y duraron unos siete u ocho meses. En las tareas participaron gente de la comarca, pero también muchos refugiados de guerra. El aeródromo tenía planta irregular y tres pistas, de 200 metros de ancho y de entre 835 y 1.050 metros de longitud.

Al sur y centradas respecto a las pistas estaban las dependencias por el mando y servicios de la tropa, y probablemente los hangares. Constaba de tres edificios de unos 3,5 metros de altura, estación radiotelegráfica y, ante él, el refugio principal enterrado a nueve metros de profundidad con capacidad para 130 personas. El edificio ubicado en el centro del conjunto acogía el comedor, la cocina y la despensa, además de seis duchas, cinco lavabos y cinco letrinas en su parte posterior. Un segundo edificio separado del primero acogía el dormitorio con una chimenea en el centro, y el tercer edificio se utilizaba de oficinas. Actualmente son visibles los restos del edificio principal con varios elementos de la cocina y la planta del comedor. El elemento más destacado, sin duda, es el refugio rehabilitado recientemente y situado frente los restos de los edificios del campo. Las dos bocas de entrada han sido reconstruidas por la empresa Cat Patrimoni siguiendo las pautas constructivas del ejército popular. Sus dimensiones harían pensar en un aeródromo importante, preparado para todo tipo de aparatos, si bien el papel que tuvo fue muy secundario.

Sin embargo, la actividad del aeródromo se redujo en los meses de abril, mayo y quizá junio y agosto de 1938, sobre todo los días 1,2 y 3 de abril coincidiendo con la ocupación de Lleida y Balaguer por parte del ejército de Franco. El 20 de enero de 1939, tras la ocupación por parte de las tropas de Franco, el aeródromo fue incorporado, junto con el de Bellpuig, en la red de aeródromos de aviación franquista para los últimos días de ofensiva sobre Cataluña.

El campo de Aranyó fue clasificado como aeródromo eventuales dentro de la red de pequeños aeródromos construidos por todo el territorio, y que se clasificaban según su importancia entre permanentes, semipermanentes, eventuales y también aeródromos trampa.

La visita al lugar es libre. Las dos puertas de entrada al refugio están cerradas con candado.