Catedral de Sigüenza Fortaleza sitiada Bookmark and Share
Fuentes consultadas
- Lugares de memoria e itinerarios de la guerra civil española. Eladi Romero. Editorial Laertes. 2009
- Información propia diarideguerra.com

Diari de Guerra.-La catedral de Sigüenza (Guadalajara) fue el escenario principal de la batalla del ejército sublevado por conquistar la ciudad, entre agosto y octubre de 1936. Comenzada a edificar el siglo XII como fortaleza defensiva en estilo románico, su construcción y decoración se prolongó varios siglos y está considerada una joya arquitectónica.

El 25 de julio varias columnas de las fuerzas republicanas, entre ellas columnas de la CNT-FAI y el POUM, entran en la ciudad. Pocos días después asesinan al obispo de Sigüenza, Eustaquio Nieto (1866-1936), en un punto de la carretera de Sigüenza a Alcolea del Pinar, en las llamadas curvas de Estriégana. Los milicianos lanzaron el obispo con el cuerpo en marcha, lo fusilaron y lo empujaron a un terraplén donde fue quemado con gasolina. El cuerpo abandonado fue encontrado el 4 de agosto por las fuerzas sublevadas e identificado por el rosario y la cruz pectoral que conservaba. Fue enterrado en Alcolea del Pinar y en 1946 sus restos fueron trasladados a la capilla de la Anunciación de la catedral de Sigüenza, donde todavía descansan.

La ciudad se bombardeada por primera vez con fuego de artillería el 7 de septiembre, El 29 de ese mes, la Legión Cóndor realizó un primer bombardeo causando graves daños a la ciudad, entre ellos la destrucción total del hospital y el hospicio del obispado, matando a todos los niños internos ya la hermanas celadoras. El 8 de octubre un nuevo bombardeo sistemático destruye el 40 por ciento de la población, matando al menos a 300 personas.El comandante Martínez de Aragón abandona Sigüenza a última hora de la tarde en busca de refuerzos. Los milicianos, unos 600, que se quedan en la ciudad ocupan la catedral y la convierten en su fortaleza. La artillería franquista bombardea la catedral los próximos días mientras un grupo milicianos consigue el día 10 abandonar el edificio y escapar del asedio. Los milicianos que resisten convierten la capilla del Santo Cristo de la Misericordia en su puesto de mando. El día 13 de octubre se intensifica el ataque provocando graves daños a la catedral. Dos días después, los milicianos se rinden, y la mayoría serán fusilados. Martínez de Aragón se encontraba a menos de 20 kilómetros de la ciudad con una columna de refuerzo.

La batalla provocó daños muy graves en la catedral, que obligaron a una profunda restauración. El 27 de julio de 1946 la Dirección General de Regiones Devastadas del Gobierno franquista entregaba oficialmente el templo restaurado al nuevo obispo de Sigüenza en un acto presidido por el mismo dictador. Ese día se cumplía el décimo aniversario del asesinato del obispo Eustaquio Nieto. La reconstrucción se ejecutó en un período de siete años.

El diario ABC relata en la crónica de la inauguración del templo reconstruido que la catedral sufrió, entre otros, daños enormes en el techo, el rosetón y la fachada. Llovía sobre el presbiterio de la catedral y creció la hierba en su interior. Actualmente se pueden observar lo que parecen impactos derivados de la batalla en la fachada principal con sus dos dos torres, y sobre todo a la esbelta torre del Gallo, en la parte posterior del templo.

Ante la fachada principal, en la calle Serrano Sanz, se ubica la oficina de turismo municipal y, a su lado, la librería Rayuela que dispone de numerosas referencias sobre la guerra civil en la provincia de Guadalajara. A pesar de la importancia histórica de la batalla de Sigüenza no hay ningún panel que muestre información específica sobre estos hechos.