A finales de enero de 1939, buena parte de la administración del gobierno de la República Española se había establecido en la comarca de la Alt Empordà, siguiendo la retirada del Ejército Popular.La masía de Can Barris, a escasa distancia de la frontera francesa, fue la sede de la presidente de la República Española, Manuel Azaña. Después de la última reunión de las Cortes en Figueres y el inicio de la evacuación de los tesoros de la República, los jefes políticas republicanos decidieron cruzar la frontera y refugiarse en el Estado francés, entre ellos el presidente de las Cortes Españolas, Diego Martínez Irujo, varios ministros y familiares.

El magnífico libro dirigido por los historiadores catalanes Josep Maria Solé y Sabaté y Joan Villaroya ‘Breve Historia de la Guerra Civil en Cataluña’ relata con precisión el trayecto de Azaña y sus acompañantes aquel día 5 de febrero. Así, el libro relata que a pesar de la existencia de un acuerdo inicial según el cual todas las autoridades republicanas pasarían la frontera el día 5 de febrero por la mañana, partiendo de La Vajol, pueblo muy cercano de Can Barrios, residencia de Azaña, la clase política republicana abandonó el país de forma separada y por diferentes lugares. El presidente de la República, Azaña, junto con el presidente de las Cortes, Diego Martínez Barrio, el presidente del Gobierno, Juan Negrín, uno reducido grupo de familiares y amigos, cruzaron la frontera por el cuello de Lli el día 5 de febrero a primera hora de la mañana. Su primer destino fue el pueblecito de Les Illes, desde donde saldrían más tarde en dirección a Perpiñán. Una vez en la ciudad, Negrín no tardó a volver a la Vajol para intentar hacer frente a unas responsabilidades de gobierno cada vez más desdibujadas. En su camino de regreso, topó con el presidente de la Generalitat, Lluís Companys, el lehendakari José Antonio Aguirre, y los consejeros del Gobierno catalán Carles Pi i Sunyer, Josep Tarradellas, Antoni M.Sbert y Pere Bosch i Gimpera. Dando muestras, un golpe más, de su animadversión hacia los dirigentes nacionalistas, Negrín rehusó las ofertas de Companys y Aguirre de acompañarlo. Prefirió volver a solas para dejar definitivamente Cataluña unos cuántos días después.

Can Barrios es una masía solariega de visión imponente ubicada en un entorno natural rodeado de bosques de alcornoques y pastos. Para contemplarla hay que coger la pequeña carretera asfaltada que une La Vajol con Maçanet de Cabrenys. Aproximadamente a un kilómetro de distancia del pueblo de La Vajol aparece a la derecha la masía. El Memorial Democràtic de la Generalitat ha instalado recientemente un plafón explicativo sobre la historia de la masía. A centenares de metros de Can Barris, se erige la enigmática Mina Negrín, donde el presidente del gobierno de la República, Juan Negrín, escondió lingotes de oro del Banco de España y numerosas obras de arte.