Westerplatte Donde todo empezó Bookmark and Share
Fuentes consultadas
- Información propia diarideguerra.com

La península de Westerplatte, a siete kilómetros del centro de Gdansk, fue el espacio donde estalló la Segunda Guerra Mundial, el día 1 de septiembre de 1939. La madrugada de ese día, el barco acorazado Schleswig-Holstein inició el bombardeo del edificio de guardia polaco. Los 182 soldados de la guarnición resistieron durante siete días antes de rendirse al invasor.

Parece ser que muy pocos minutos antes de que el acorazado alemán abriera fuego, recibió el ataque de una ametralladora polaca colocada al faro (Nowy Port Lighthouse), situado en la orilla opuesta de la península. Como respuesta, a las 04.45 horas del 1 de septiembre de 1939, el Schleswig-Holstein inicia el bombardeo contra la guarnición polaca establecida en la península de Westerplatte, a siete kilómetros de Gdansk, y contra el mismo faro. A las 4:50 horas, el oficial al frente de la guarnición, el mayor Henry Sucharski, establece comunicación telefónica con el mando de la armada en Gydnia para informar del ataque. La segunda guerra mundial había comenzado.

El bombardee alemán fue apoyado de manera simultánea por ataques de infantería, rechazados una y otra vez por los defensores polacos. La guarnición de Westerplatte resistió pero poco a poco bajaron las reservas de agua mientras el terreno se cubrió de cráteres provocados por los bombardeos. Los intensos ataques continuaron día y noche por tierra, mar y aire hasta que el día 7 de septiembre, a las 10.15 horas, Sucharski tomó la decisión de levantar la banda blanca. La batalla junto sólo la vida de 15 soldados polacos. Los oficiales y soldados alemanes que conquistaron la plaza admitieron la valentía de los defensores, permitiendo que Suchasrki mantuviera su espada camino del cautiverio.

Hoy, el espacio histórico mantiene intacto dentro de una zona arbolada los restos del edificio de guardia número 1, convertida en un pequeño museo, y los restos del gran edificio de las barracas de los defensores, medio destruido a raíz de los combates. En su alrededor varias placas, lápidas y una cruz recuerdan a los soldados de la guarnición, liderados por Henryk Sucharski. Una avenida conduce al visitante hasta el centro de la península donde se construyó una plaza presidida por un enorme monumento en honor a los soldados defensores, inaugurado en 1966, en plena época soviética. La entrada del pequeño museo está presidida por dos proyectiles de 280 mm lanzados por Schleswig-Holstein.