domingo, 29 de enero de 2017 Volver a las noticias
Reportaje: Kommeno, una memoria de Grecia que Tsipras saca del olvido

29/01/2017.-Diario de Guerra (Andreu Caralt) .- El sol se esconde cuando llegamos a Arta, capital de una jefatura alejada del turismo en el oeste de la Grecia continental. Ninguna señal aparente indica el desvío hacía el pequeño pueblo rural de Kommeno. Nos detenemos en una gasolinera y preguntamos, un joven repartidor en motocicleta nos guía hasta el itinerario correcto.

Cruzamos barrios periféricos de la pequeña ciudad hasta llegar al campo, una zona rural rodeada de plantaciones de cítricos junto a un río, el Arachtos, que desemboca en su estuario. En quince minutos llegamos a Kommeno, a su cementerio y su iglesia. Preguntamos por el monumento, por la masacre, los nazis. Nada. Preguntamos por Tsipras y, ahora sí, nos conducen a una gran plaza cercana rodeada de cafeterías habitadas por unos pocos hombres, siempre hombres, mayores de edad.

16 de agosto de 1943
Es una escena oscura, sólo deslumbrada por un imponente monumento de mármol blanco iluminado. Están escritos en las cuatro caras del monolito los nombres de 317 vecinos asesinados el 16 de agosto de 1943 en una masacre perpetrada por una unidad de la Wehrmacht alemana. La más pequeña es Alexandra Kristina, de un año, y la mayor, Anastasia Costa, de 75 años. Setenta y cuatro víctimas eran niños menores de 10 años y veinte familias fueron absolutamente aniquiladas.

La razón del asalto fue la presencia, descubierta por una unidad de reconocimiento de la Wehrmacht, de varios partisanos que habían dejado sus fusiles contra el árbol de la plaza de pueblo y pedían comida a los habitantes. Era la primera vez en dos años que soldados alemanes visitaban el pequeño pueblo perdido y su presencia causó pánico. Una delegación del pueblo se desplazó a Arta para relatar a los delegados italianos lo que había sucedido y pedir seguridad, y así se les ofreció. El mando de la Wehrmacht, sin embargo, decidió activar una 'operación sorpresa' contra Kommeno, de madrugada.

'Nadie de pie'
Los responsables de ejecutarla serían un centenar de soldados de un regimiento de la 1era División de Montaña. La orden era 'no dejar a nadie de pie'. Equipados con ametralladoras, rifles y granadas, los hombres de la Wehrmacht asaltaron las casas para asesinar a los vecinos, que en buena parte estaban durmiendo. El pueblo había quedado cercado y la única vía de escape fue el río. Cientos de vecinos pudieron nadar a la orilla opuesta y así evitar una muerte segura mientras oían los gritos de espanto de los que no pudieron escapar. Para completar la operación 'sorpresa', quemaron el pueblo. El horror se prolongó seis horas.

Pueblos mártires
La masacre de Kommeno no es un caso aislado, es un ejemplo de la larguísima lista de pueblos mártires del país helénico durante los cuatro años de ocupación de las fuerzas del Tercer Reich, de 1941 a 1944. Un informe del gobierno Griego en el exilio en 1944 cifra en 879 los pueblos totalmente destruidos en actos de terror de las fuerzas de ocupación en su plan de detener el auge de la lucha partisana, 460 pueblos más serían destruidos parcialmente. Miles de civiles fueron asesinados. Los casos más conocidos son los de Kalavrita, en el Peloponeso, con 511 hombres asesinados en diciembre de 1943, y Distomo, cerca de Delfos, con cerca de 300 hombres fusilados. En ambos casos se han erigido enormes monumentos en cerros que dominan los pueblos y en Kalavrita un museo mantiene el recuerdo perenne de los hechos.

Visita del primer ministro
Ningún primer ministro había asistido al acto de homenaje anual organizado en Kommeno, hasta el año pasado, en el que Alexis Tsipras participó. En un día soleado y caluroso, en la misma plaza rodeada de cafés, el líder de Syriza recordó los caídos antes de insistir, una vez más, en la demanda al Gobierno alemán de Angela Merkel del pago de reparaciones de guerra, incluyendo los préstamos forzosos que el gobierno Griego otorgó de manera forzosa. La factura se eleva a 278.700 millones de euros al cambio actual. "Grecia y el pueblo griego no se olvidan de la historia ni de los crímenes de guerra y matanzas del ejército nazi y exige el reconocimiento efectivo del Gobierno alemán, incluso 76 años después ... Es nuestro deber para con los pueblos de Europa que lucharon contra los nazis ", dijo ese día.